
La mayoría de nosotros vivimos detrás de una armadura para "protegernos" del mundo que nos rodea, de una "máscara" para enfrentarnos a las personas que se nos acercan diariamente, de una "apariencia" para sobrellevar las situaciones que se nos presentan sin demostrar lo que estamos sintiendo . . . Es decir, les mostramos al mundo lo que creemos es mejor para que funciones correctamente y no tengamos problemas ; gran error, primero porque nos estamos mintiendo nosotros mismo, segundo porque todos tienen dificultades y tienen derecho a expresarlas, tercero porque todo lo que "guardamos" y nos daña no "depurándolo" de nuestro interiror nos va enfermando . . .
Para cambiar, primero debemos quitarnos la armadura y confiar en Dios la protección que necesitamos.
Segundo, debemos sacarnos la máscara y mostrarnos realmente como somos y nos sentimos . . . quién nos quiere debe querernos como somos, no podemos ser como los demás quieren que seamos .